Bella señora, mi obsesión prohibida

La vida muta de maneras impensadas.
Sergio recibió una herencia impensada, pasó de ser un simple trabajador a ser millonario, sin estar seguro como invertir su fortuna, decidió comprar un club deportivo.
Fue allí dónde se reencontró con la mujer que había sido, sin saberlo, la dueña de sus noches, su delirio y su obsesión.
Ya no era un adolescente, que soñaba con un amor imposible, era un hombre y estaba ansioso de poder demostrárselo…
La tensión sexual existía, se palpaba, pero… ¿Podrá conquistar su corazón?
Ella, 3 años mayor que él, con un hijo, un matrimonio derrumbándose y pasando los días entre su niño, el salón de belleza de la cual era dueña y una soledad que la envolvía continuamente, a pesar de todo, se mantenía en pie, porque ni siquiera su marido iba a derrumbarla.