Capítulo 12

Las lágrimas vinieron en el momento en que cerré la puerta de mi habitación. Tres años de matrimonio por contrato, y aún no podía matar este estúpido corazón. Presioné mis manos vendadas contra mis ojos, pero las lágrimas seguían brotando de todas formas.

Dios, qué patética soy.

Había pensado—por ...

Login to Unlock ChaptersPromotion