


En medio de un mar de emociones se encuentra  Allan  tras la pérdida de su padre. Esto provoca que se quede al mndo de un inmenso imperio millonario que viene de la mano de asumir una inesperada responsabilidad. 
A su vida llega sin aviso la única mujer a la que está obligado a asumir por condiciones de un convulso testamento. 
Pero la pregunta principal es: ¿Quién era está chica para su difunto padre?
¿Será que empezará a ser algo para él también? 
Su pelo negro azabache combina hasta la locura con sus ojos verdes Jade que hacen que Allan no consiga dejar de pensar en ella una vez que la tiene delante.
El carácter impetuoso de ella, y su forma valiente de no dejarse dominar sumado al deseo que uno revoca en el otro son el ingrediente perfecto para explorar el amor en las condiciones menos favorables.
¿Podrán ser felices juntos?
¿Acaso tienen ese derecho?
A veces la pasión más grande es el pecado más ilícito. 
Allan y Callie describiran paso a paso, que nada es lo que parece y que a veces amar... llega con un alto precio y demasiado tarde a la vida de algunas personas.
Un lucha por amor.
Un secreto devastador y noches de pasión arrolladora llenan las páginas de esta explosiva novela en medio de un oscuro trasfondo en medio de una herencia caótica. 
Ahí tienes tu dinero, está claro que te sobra si lo regalas a una cualquiera  cono yo.No lo necesito...Idiota arrogante.
Pero mentí... lo necesitaba... ese mismo mes murió mi madre y me quedé sin nada más que una pena muy grande y un dolor en el corazón.
Me he perdido en su forma de tratarme, de hacerme sentir en medio de un cuento de hadas 

Una pasión arriesgada 


El ambiente es casi satánico. No sé, quizás sea yo pero lo veo todo satánico siniestro que siento que estoy a punto de oír sonar las cornetas del infierno.
Igual es que a veces me pongo tremendista.
El tío y los primos de Llan están sentados del lado opuesto al nuestro. Ellos en un sofá de tres...

  

El ambiente es casi satánico. No sé, quizás sea yo pero lo veo todo satánico siniestro que siento que estoy a punto de oír sonar las cornetas del infierno.
Igual es que a veces me pongo tremendista. 
El tío y los primos de Llan están sentados del lado opuesto al nuestro. Ellos en un sofá de tres...

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