Capítulo 153

—Oh, lo era—bromeé—. Pero tú eras el viudo gruñón que apenas sonreía, a menos que hubiera panqueques o piratas de por medio.

Se inclinó lo suficiente para que nuestros ojos se encontraran, su mirada cálida e indescifrable.

—Y entonces hiciste reír a los niños.

Parpadeé.

—Y dibujé por todas tus p...

Login to Unlock ChaptersPromotion