122

El aire nocturno estaba cargado con la tensión persistente de lo que había ocurrido antes. Bavanda se sentaba junto al fuego, con las rodillas abrazadas contra su pecho, mirando las llamas titilantes. Todavía sentía los restos del monstruo dentro de ella, arañando los bordes de su mente. La aterrori...

Login to Unlock ChaptersPromotion