Por favor perdóname

NOCTURNO DE HARDIN

No dormí.

No pude.

La única vez que cerré los ojos fue cuando rezaba, susurrando súplicas silenciosas y desesperadas en la oscuridad. Cada vez que el monitor cardíaco de Ariana emitía un pitido, se sentía como una nana y una sirena al mismo tiempo. Vivía para esos sonidos ahora...

Login to Unlock ChaptersPromotion